Por castración entendemos la extirpación de los órganos sexuales (testículos en machos y ovarios en hembras), también puede incluir la extirpación de otros componentes del tracto genital (útero, por ejemplo).
En el caso de los hurones, la necesidad de llevar a cabo esta cirugía es imprescindible debido a:
- Los animales no castrados son mucho más indóciles. Los machos pueden ser muy agresivos y atacar a otros hurones (hasta matarlos) e incluso al propietario, provocándole heridas importantes.
- Las hembras, por sus características fisiológicas especiales, están en celo hasta ser cubiertas. De no producirse la cubrición pueden morir por anemias graves.
- Los animales castrados, sobre todo en el caso de los machos, desprenden un olor menos intenso que los animales enteros.
